Caso I: Los Tacos de Shaggy
Shaggy llegó emocionado esa mañana:
– «Que crees?, voy a poner un puesto de tacos»
– «Excelente, de que van a ser?»
– «De Arrachera, van pesados para garantizar la calidad»
– «Será la cantidad, no? la calidad no tiene que ver con el peso»
– «Bueno, para garantizar el peso exacto en todas las porciones»
– «Y quien lo va a atender?»
– «Ya tengo todo listo, lo van a atender mi hermana y mi cuñado, nos hicimos socios»
Ya desde que me dijo que su hermana era su socia ya me sonaba a que habría problemas.
– «Como tus socios?»
– «Si, ellos van a atender el puesto y yo voy a poner todos los materiales, ya compre el puesto, el trompo y tengo ya quien me va a surtir la carne»
– «Pero, si solo van a atender el puesto, por qué van a ser tus socios?»
– «Ah, es que nos vamos a ir a mitad de las ganancias, mi hermana anda sin trabajo y la verdad es que necesita el varo»
– «Y el cuñado?»
– «Bueno, es que mi cuñado le va a ayudar, aparte no creo que me chinguen, son mi familia»
– «No dije eso, yo creo que está bien, pero creo que tienes que poner las reglas claras, hasta donde entiendo, tu vas a poner el local y ellos el trabajo, cierto?»
– «Cierto»
Pasaron algunos meses, mas o menos tres:
– «Como van tus tacos Shaggy?»
– «Bien, he tenido que meter dinero cada quincena, pero es en lo que nos aclientamos»
– «Pero, ya llevas algunos meses no?, cuanto se tarda en adquirir un cliente?»
– «Pues, es lento, aparte tengo algunos problemas de dinero»
– «Por qué razón?»
– «Es que mi hermana ya me pidió que le pase un sueldo porque no le alcanza»
– «Pero, me dijiste que le estarías dando la mitad de tus ganancias, cuanto sale?»
– «Pues, no mucho, las ganancias son pocas»
– «Se te está quedando la carne?»
– «No, se vende toda, pero estoy teniendo que resurtir cada semana y son gastos»
– «Resurtir, estas re invirtiendo?, estas creciendo entonces»
– «No, entre el sueldo de mi hermana y mi cuñado se va todo»
Yo estaba comenzando a incomodarme y hasta a ponerme de malas, me parece increíble que la gente le haga eso a sus hermanos, más a uno tan noble como Shaggy
– «De nuevo, a ver por partes, cada semana estas comprando carne?»
– «Si»
– «Cada semana le estas pagando su sueldo a tu hermana y tu cuñado?»
– «Si»
– «Pero son tus socios, por qué ellos son los únicos que están ganando en esta sociedad?»
– «A que te refieres»
– «Cuanto metes de mercancía cada semana?»
– «Dos mil pesos mínimo»
– «Suponiendo, sin yo saber nada de tu negocio, que debes ganar el 40%, deberías tener 2,800 cada semana, y sin embargo, cada semana estás metiendo mercancía, te lo digo porque ya me ha sucedido»
– «Si, pero cada semana tengo que pagar sueldos»
– «Si, eso debería formar parte de tus gastos, no de tu 40%, si no para que es el negocio? para pagar sueldos?»
Shaggy al principio estaba molesto, pero conforme hablábamos su cara se ponía triste
– «Shaggy, se están gastando el dinero de las ganancias y aparte te están cobrando sueldo, haz los números, pídeles que te apunten todo lo que se vende»
– «Pero como lo hago? que tal si se ofenden?»
– «No tienen por qué ofenderse a menos que si te estén robando, tienes que averiguar, a lo mejor son moches»
– «Esta bien, voy a revisar»
Pasaron dos, tres semanas a lo sumo:
– «En que quedó Shaggy?»
– «Ya lo tuve que quitar, si me estaban dando vuelta»
– «Como estuvo?»
– «Pues hice las cuentas y resulta que nada cuadraba, no me pudieron justificar los gastos y al final se hicieron los ofendidos»
– «Perdón amigo»
– «No, al contrario, solo me siento mal que mis propios familiares me hayan hecho algo así, al menos sé que mis sobrinos recibieron parte de esos ingresos»
– «Pues si, ya ni modo, te dije que ya me había pasado a mí»
– «Si, ya ni modo»
En arca abierta, el justo peca